Casa escondida

Había una vez una puerta modesta de chapa. Tras de esa puerta se proyectaba un largo pasillo. Luego de ese pasillo, aparecía otro a la izquierda y otro largo tramo final girando a la derecha. Tras todo este recorrido nuestra cliente llego al patio de lo que llamamos “Casa Escondida”, le vio potencial para hacer de aquello su hogar, su paraíso.  En ese momento nos lo compartió, le vimos el mismo potencial y aún más, a este diamante en bruto. 

La tipología era extraña. Un patio como centro de escena se anteponía a la casa detenida en los años setenta, atravesada en todo su frente por una escalera robusta que dirigía a la terraza. Nuestro campo de acción iba a darse en renovar los cincuenta metros cuadrados de la casa y todo el patio. 

De lo que fue una casa oscura y con una distribución de energías trabadas, hicimos una de concepto abierto con espacios amplios, comunicados entre ellos, donde la circulación de luz, aire y de desplazamiento, son fluidos y cómodos. No solo ampliamos en sentido horizontal demoliendo paredes, sino también extendimos picando los techos hasta llegar a la bovedilla, y dejamos lucir esos ladrillos escondidos de aproximadamente cien años.

En el patio logramos hacer el sueño de Vivi realidad construyendo una pequeña pileta enfrentada a la cocina. La escalera de material que cruzaba la fachada de la casa, la demolimos, reemplazándola por una de hierro pequeña y lateralizada, despejando así todo el frente de la casa. El diseño de puertas y ventanas de hierro los diseñamos inspirados en líneas antiguas, de modo que sugieran la edad real de la construcción, pero con un look más actual.

Hay muchísimo para contarles de esta casa, cada detalle, cada espacio… Las imágenes hablan por si mismas. Es un proyecto que adoramos desde el día uno y superó todas nuestras expectativas en el proceso y el resultado. Nuestro espacio preferido? Sin dudas la cocina con un aire francés, medio citadino, medio campiña. Es el corazón de la casa escondida.